domingo, 23 de noviembre de 2008

Carta de Sor Filotea


Carta de Sor Filotea de la Cruz


Señora mía: He visto la carta de V. md. en que impugna las finezas de Cristo que discurrió el Reverendo Padre Antonio de Vieira en el Sermón del Mandato con tal sutileza que a los más eruditos ha parecido que, como otra Águila del Apocalipsis, se había remontado este singular talento sobre sí mismo, siguiendo la planta que formó antes el Ilustrísimo César Meneses, ingenio de los primeros de Portugal; pero a mi juicio, quien leyere su apología de V. md. no podrá negar que cortó la pluma más delgada que ambos y que pudieran gloriarse de verse impugnados de una mujer que es honra de su sexo.
Yo, a lo menos, he admirado la viveza de los conceptos, la discreción de sus pruebas y la enérgica claridad con que convence el asunto, compañera inseparable de la sabiduría; que por eso la primera voz que pronunció la Divina fue luz, porque sin claridad no hay voz de sabiduría. Aun la de Cristo, cuando hablaba altísimos misterios entre los velos de las parábolas, no se tuvo por admirable en el mundo; y sólo cuando habló claro, mereció la aclamación de saberlo todo. éste es uno de los muchos beneficios que debe V. md. a Dios; porque la claridad no se adquiere con el trabajo e industria: es don que se infunde con el alma.
Para que V. md. se vea en este papel de mejor letra, le he impreso; y para que reconozca los tesoros que Dios depositó en su alma, y le sea, como más entendida, más agradecida: que la gratitud y el entendimiento nacieron siempre de un mismo parto. Y si como V. md. dice en su carta, quien más ha recibido de Dios está más obligado a la correspondencia, temo se halle V. md. alcanzada en la cuenta; pues pocas criaturas deben a Su Majestad mayores talentos en lo natural, con que ejecuta al agradecimiento, para que si hasta aquí los ha empleado bien (que así lo debo creer de quien profesa tal religión), en adelante sea mejor.
No es mi juicio tan austero censor que esté mal con los versos --en que V. md. se ha visto tan celebrada--, después que Santa Teresa, el Nacienceno y otros santos canonizaron con los suyos esta habilidad; pero deseara que les imitara, así como en el metro, también en la elección de los asuntos.
No apruebo la vulgaridad de los que reprueban en las mujeres el uso de las letras, pues tantas se aplicaron a este estudio, no sin alabanza de San Jerónimo. Es verdad que dice San Pablo que las mujeres no enseñen; pero no manda que las mujeres no estudien para saber; porque sólo quiso prevenir el riesgo de elación en nuestro sexo, propenso siempre a la vanidad. A Sarai la quitó una letra la Sabiduría Divina, y puso una más al nombre de Abram, no porque el varón ha de tener más letras que la mujer, como sienten muchos, sino porque la i añadida al nombre de Sara explicaba temor y dominación. Señora mía se interpreta Sarai; y no convenía que fuese en la casa de Abraham señora la que tenía empleo de súbdita.
Letras que engendran elación, no las quiere Dios en la mujer; pero no las reprueba el Apóstol cuando no sacan a la mujer del estado de obediente. Notorio es a todos que el estudio y saber han contenido a V. md. en el estado de súbdita, y que la han servido de perfeccionar primores de obediente; pues si las demás religiosas por la obediencia sacrifican la voluntad, V. md. cautiva el entendimiento, que es el más arduo y agradable holocausto que puede ofrecerse en las aras de la Religión.
No pretendo, según este dictamen, que V. md. mude el genio renunciando los libros, sino que le mejore, leyendo alguna vez el de Jesucristo. Ninguno de los evangelistas llamó libro a la genealogía de Cristo, si no es San Mateo, porque en su conversión no quiso este Señor mudarle la inclinación, sino mejorarla, para que si antes, cuando publicano, se ocupaba en libros de sus tratos e intereses, cuando apóstol mejorase el genio, mudando los libros de su ruina en el libro de Jesucristo. Mucho tiempo ha gastado V. md. en el estudio de filósofos y poetas; ya será razón que se perfeccionen los empleos y que se mejoren los libros.
¿Qué pueblo hubo más erudito que Egipto? En él empezaron las primeras letras del mundo, y se admiraron los jeroglíficos.
Por grande ponderación de la sabiduría de José, le llama la Sagrada Escritura consumado en la erudición de los egipcios. Y con todo eso, el Espíritu Santo dice abiertamente que el pueblo de los egipcios es bárbaro: porque toda su sabiduría, cuando más, penetraba los movimientos de las estrellas y cielos, pero no servía para enfrenar los desórdenes de las pasiones; toda su ciencia tenía por empleo perfeccionar al hombre en la vida política, pero no ilustraba para conseguir la eterna. Y ciencia que no alumbra para salvarse, Dios, que todo lo sabe, la califica por necedad.
Así lo sintió Justo Lipsio (pasmo de la erudición), estando vecino a la muerte y a la cuenta, cuando el entendimiento está más ilustrado; que consolándole sus amigos con los muchos libros que había escrito de erudición, dijo señalando a un santocristo: "Ciencia que no es del Crucificado, es necedad y sólo vanidad".
No repruebo por esto la lección de estos autores; pero digo a V. md. lo que aconsejaba Gersón: Préstese V. md., no se venda, ni se deje robar de estos estudios. Esclavas son las letras humanas y suelen aprovechar a las divinas; pero deben reprobarse cuando roban la posesión del entendimiento humano a la Sabiduría Divina, haciéndose señoras las que se destinaron a la servidumbre. Comendables son, cuando el motivo de la curiosidad, que es vicio, se pasa a la estudiosidad, que es virtud.
A San Jerónimo le azotaron los ángeles porque leía en Cicerón, arrastrado y no libre, prefiriendo el deleite de su elocuencia a la solidez de la Sagrada Escritura; pero loablemente se aprovechó este Santo Doctor de sus noticias y de la erudición profana que adquirió en semejantes autores.
No es poco el tiempo que ha empleado V. md. en estas ciencias curiosas; pase ya, como el gran Boecio, a las provechosas, juntando a las sutilezas de la natural, la utilidad de una filosofía moral.
Lástima es que un tan gran entendimiento, de tal manera se abata a las rateras noticias de la tierra, que no desee penetrar lo que pasa en el Cielo; y ya que se humille al suelo, que no baje más abajo, considerando lo que pasa en el Infierno. Y si gustare algunas veces de inteligencias dulces y tiernas, aplique su entendimiento al Monte Calvario, donde viendo finezas del Redentor e ingratitudes del redimido, hallará gran campo para ponderar excesos de un amor infinito y para formar apologías, no sin lágrimas contra una ingratitud que llega a lo sumo. O que útilmente, otras veces, se engolfara ese rico galeón de su ingenio de V. md. en la alta mar de las perfecciones divinas. No dudo que sucedería a V. md. lo que a Apeles, que copiando el retrato de Campaspe, cuantas líneas corría con el pincel por el lienzo, tantas heridas hacía en su corazón la saeta del amor, quedando al mismo tiempo perfeccionado el retrato y herido mortalmente de amor del original el corazón del pintor.
Estoy muy cierta y segura que si V. md., con los discursos vivos de su entendimiento, formase y pintase una idea de las perfecciones divinas (cual se permite entre las tinieblas de la fe), al mismo tiempo se vería ilustrada de luces su alma y abrasada su voluntad y dulcemente herida de amor de su Dios, para que este Señor, que ha llovido tan abundantemente beneficios positivos en lo natural sobre V. md., no se vea obligado a concederla beneficios solamente negativos en lo sobrenatural; que por más que la discreción de V. md. les llame finezas, yo les tengo por castigos: porque sólo es beneficio el que Dios hace al corazón humano previniéndole con su gracia para que le corresponda agradecido, disponiéndose con un beneficio reconocido, para que no represada, la liberalidad divina se los haga mayores.
Esto desea a V. md. quien, desde que la besó, muchos años ha, la mano, vive enamorada de su alma, sin que se haya entibiado este amor con la distancia ni el tiempo; porque el amor espiritual no padece achaques de mudanza, ni le reconoce el que es puro si no es hacia el crecimiento. Su Majestad oiga mis súplicas y haga a V. md. muy santa, y me la guarde en toda prosperidad.


De este Convento de la Santísima Trinidad, de la Puebla de los Ángeles, y noviembre 25 de 1690.

Su afecta servidora
Filotea de la Cruz.

martes, 11 de noviembre de 2008

Figuras retóricas

Anáfora
(Es una repetición de palabras al principio de un verso o al principio de frases semejantes)
¿Soledad, y está el pájaro en el árbol,soledad, y está el agua en las orillas,soledad, y está el viento en la nube,soledad, y está el mundo con nosotros,soledad, y estás tú conmigo solos?

Antítesis (Contraste)
(Contrapone dos ideas o pensamientos; es una asociación de conceptos por contraste. El contraste puede ser por oposición de palabras (antónimos), frases de significado contrario, etc.)
A florecer las flores madrugaron.Y para envejecerse florecieron;Cuna y sepulcro en un botón hallaron.

Elipsis
(Suprime elementos de la frase (sin perjuicio de la claridad), dotándola de brevedad, energía, rapidez y poder sugestivo.
Por una mirada, un mundo;por una sonrisa, un cielo;por un beso. . . ¡yo no séqué te diera por un beso!

Epíteto
(Es el adjetivo, que colocado delante del sustantivo, expresa una cualidad de alguna persona o cosa)
«el terrible Caín», «la blanca nieve»

Asíndeton
(Consiste en omitir las conjunciones para dar a la frase mayor dinamismo)
Acude, corre, vuela,traspasa la alta sierra, ocupa el llano,no perdones la espuela,

Polisíndeton
(Consiste en usar más conjunciones de las necesarias para dar a la frase una mayor solemnidad)
Ni nardos ni caracolastienen el cutis tan fino,ni los cristales con lunarelumbran con ese brillo.

Aliteración
(Es una repetición del sonido inicial en varias palabras de un mismo verso, estrofa o frase)
Si piensas que no soy su dueño, Alcino,suelta y verás si a mi choza vieneque aún tienen sal las manos de su dueño.

Onomatopeya
(Consiste en imitar sonidos reales por medio del ritmo de las palabras)
En el silencio sólo se escuchabaun susurro de abejas que sonaba.

Hipérbaton
(Consiste en invertir el orden gramatical de las palabras en la oración y la ilación lógica de las ideas)
Yo quisiera escribirlo, del hombredomando el rebelde, mezquino idioma.
«domando el rebelde, mezquino idioma del hombre»
Cerca del Tajo, en soledad amena,De verdes sauces hay una espesura.
«hay una espesura de verdes sauces»

Hipérbole
(Consiste en exagerar las cosas aumentando o disminuyendo la verdad de lo que se dice.)
«Tengo un sueño que me muero»

Érase un hombre a una nariz pegado:érase una nariz superlativa;érase una nariz sayón y escriba;érase un pez de espada muy barbado.

Personificación (Prosopopeya)
(Consiste en atribuir cualidades propias de los seres animados y corpóreos a los inanimados o abstractos y, en particular, los atributos humanos a otros seres animados o inanimados)
Los invisibles átomos del aireen derredor palpitan y se inflaman;

Sólo se oirá la risa blanca de las estrellasPersiguiendo a las sombras por todos los caminos.

Símil o comparación
(Expresa de una manera explícita la semejanza entre dos ideas valiéndose de las partículas como y cual.)
Murmullo que en el alma se eleva y va creciendo,como volcán que sordoanuncia que va a arder

Y todo en la memoria se rompía,tal una pompa de jabón al viento.

Paradoja
(Es una antítesis superada porque une ideas contradictorias por naturaleza, en un mismo pensamiento el cual generalmente encierra una verdad profunda)
La noche sosegada, en par de los levantes de la aurora,la música callada, la soledad sonora,la cena que recrea y enamora.

Vivo sin vivir en mí,y tan alta vida espero,que muero porque no muero

¡Oh soledad, que a fuerza de andar solase siente de sí misma compañera!

Perífrasis (circunlocución)
(Dice con un rodeo de palabras lo que podría decirse con menos o hasta con una sola)
Allí los ríos caudales,allí los otros, medianosy más chicos;allegados, son iguales
«los que viven por sus manos (por los artesanos) y los ricos.»
«Doméstico es del Sol nuncio canoro» (por el gallo)

Alusión
(Es la perífrasis que hace referencia a persona o cosa conocida sin nombrarla)
Aquél sólo me encomiendo,aquél sólo invoco yode verdad, que en este mundo viviendo,el mundo no conociósu deidad

Y cuando llegue el día del último viaje,y esté al partir la nave que nunca ha de tornar. . .

Eufemismo
(Es la perífrasis que se emplea para evitar una expresión penosa u horrenda, grosera o malsonante)
Le señaló la puerta. (por echarlo de casa)
Pasó a mejor vida. (por morir)

Ironía
(Da a entender lo contrario de lo que se dice)
¿Y quién duda que tenemos libertar de imprenta?¿Que quieres imprimir una esquela de muerto;más todavía, una tarjeta con todo tu nombre y tu apellido bien especificado? Nadie te lo estorba.

Sarcasmo
(Es la ironía misma cuando pasa al tono amargo o mordaz, cruel, insultante)
Gocemos, sí; la cristalina esferagira bañada en luz: ¡bella es la vida!¿Quién a parar alcanza la carreradel mundo hermoso que al placer convida?Brilla radiante el sol, la primavera,los campos pinta en la estación florida:Truéquese en risa mi dolor profundo . . .Que haya un cadaver más ¿qué importa al mundo?

Sinestesia
(Es la descripción de una experiencia sensorial en términos de otra.)
Que el alma que hablar puede con los ojostambién puede besar con la mirada.

Sobre la tierra amargacaminos tiene el sueño . . .

¡Qué tristeza de olor de jazmín!

TROPOS

Metáfora
(Es una identificación de un objeto con otro en virtud de una relación de semejanza que hay entre ellos, es decir, una comparación.)
El cristal del agua

Nuestras vidas son los ríosque van a dar a la marque es el morir . . .

Metonimia
(Es cuando se da a un objeto el nombre de otro por una relación de causa u origen.)
Vive de su trabajo

Respeto las canas

Tener la pluma fácil

Sinécdoque
(Consiste en designar un objeto con el nombre de otro debido a que hay una relación de coexistencia.)
Un rebaño de cien cabezas.

El hombre fue hecho de barro.

El salón se inquietaba.

Talaron la madera de la región.